La vida no está hecha para cobardes, la vida no está hecha para valientes, la vida no está hecha para nadie, simplemente es inexistente. La vida no nos hace, somos nosotros la que la hacemos a ella. Su existencia es dependiente de la nuestra. Llamar a algo por su nombre, no lo hace existente sino lo entendemos y es por eso que no habría vida sin nosotros, quienes la creamos y creemos entenderla. Formada por realidades, irrealidades, por cosas abstractas, concretas, por seres racionales o irracionales... Es así como todo aparece, aparece al ser mencionado, al formase un conjunto de cosas, de reacciones y vivencias que no entendemos pero creemos poder hacerlo. Así es como surge el amor. De la forma más inesperada posible, y por tanto, de una forma que nadie es capaz de asimilar aunque lo intente. No hay verdad exacta sobre él, porque cada uno de nosotros lo definiríamos de una forma distinta sin saber quien de todos nosotros tiene razón. Quizás por eso l amor de tu vida sea él, quizá se llame así porque es la persona que más incomprensión causa en nosotros y el ansía por conocer realmente lo que es eso que sentimos cuando estamos a su lado sea el motivo por el que ese amor es para todo la vida. Es incomprensible que todos seamos iguales pero no accionemos a todas las personas del mismo modo y que no todas las personas nos produzcan las mismas sensaciones. Supongo que es por el primer pensamiento que causa su físico en nosotros, por su apariencia, la juzgamos y nuestro corazón lo rechaza o acepta según el pensamiento producido.
El amor se interpreta de diferentes formas según con quien lo compartas, pero siempre será insuficiente. Nunca son suficientes las horas que pasáis juntos si hay amor de por medio, es otra de las cosas que nos hace permanecer al lado de esa persona. Siempre creemos que al separarnos hemos perdido lo mejor y eso quizá no haya venido o quizá este pasando ahora. Es importante pensar que por muy bien que hayas estado con una persona siempre va a haber más con las cuales tu corazón se active mucho más lento, que lo que te cause no te llene y no quieras permanecer a su lado, pero va a haber otras tantas con las que tu corazón acelere como nunca lo había hecho, produciendo algo nuevo para ti que cree ese algo inexplicable y haga que permanezcas a su lado para buscar respuesta, y sólo, solo cuando la obtengas sabrás lo que es realmente el amor, insuficiencia ante la abundancia.
