Cuando estés triste o simplemente sin esa sonrisa

Aquí estoy, de nuevo intentándoos sacar una de vuestras mejores sonrisas. Tal vez algunos me leáís porque no tenéis nada mejor que hacer, quizá porque el título de la entrada os llamó la atención, o porque simplemente sentísteis cierta curiosidad por esto. Bien, espero que te guste...
En esta nueva entrada me gustaría haceros ver lo tonto que es o que son, en general cosas como sentirse inferior, enfadarse, estar triste, lamentarse... cosas de este tipo que no dejan ver el presente con claridad ni abrirse al futuro, solo nos cierran en nosotros mismos, nos adentra en esa oscuridad a la que tememos al llegar la noche.
Todos tenemos días malos, pero sabéis eso solo es porque valoramos los días buenos. Si lo días buenos los valoramos, porque no hacemos lo mismo con nosotros?? A veces, no estaría de más dedicarnos tiempo a nosotros mismos y no exigirnos tanto. Os pondré el ejemplo del vaso: cuando se nos cae un vaso de las manos ya empezamos a oír ese ruido de nuestra cabeza que nos dice "no sabes hacer nada, ya lo has tirado" incluso a veces, llegamos a insultarnos. Pero, cuando hacemos algo bien nos premiamos tanto como nos castigamos cuando lo hacemos mal?
Para llegar a valorarnos más tal vez cada día debamos hacer alguna de las siguientes cosas que os dejo a continuación:

  •  Enámorate de ti y de tus defectos y virtudes cada mañana.
  •  Sé tu mismo, los demás ya están cojidos. 
  • Dedícate a tí mismo un día, dedicate a ser tu mejor amigo en las buenas y en las malas. 
  • Levántate cada mañana convencido de que hoy ni nada ni nadie te va a arruinar el día.
  • Sé el protagonista de tu propia vida, porque nadie más lo será por ti, sé el héroe y el villano, sé el perro y el gato, sé todo aquello que los demás dicen que no puedes llegar a ser. 
  • Cómete el 90 60 90, cómete a doña perfecta. 
  • Ponte unas pelis y unas palomitas, tal vez tu culo no te lo agradezca pero sé que tu sonrisa sí.

Poco a poco te darás cuenta que el único amor eterno es el amor propio. Nunca eres el mismo que ves en el espejo, eres mucho más que eso. Eres vida, sueños, pasiones, metas, objetivos, eres ganas de reír y de llorar confundidas, eres tú y con eso basta.
Me gustaría que con esto aprendieséis a estar más contentos con vosotros mismos, a ser capaces de valorar vuestros aciertos incluso más que vuestros errores. A veros vuestras virtudes antes que vuestros defectos, para esto me contaron una vez que suele funcionar el mirarte en un espejo y por cada fallo o defecto que veas en ti mismo y no te guste, pones un pos-it en el espejo, que contenga algo tuyo positivo que te guste, tapando asi el defecto, por una virtud. Así cuando te mires nada en ti podrá ser malo.
Y ahora, te dejo que sigas con lo que estabas haciendo, pero eso sí solo si sonríes, porque hoy aún estás a tiempo de ser un poco más feliz.
                   


All the truth

Cada vez que damos un paso, quizá nos inquiete cometer un error, andamos con miedo a meter la pata. A veces es mejor andar rápido para no párate a pensar los fallos que puedes llegar a cometer pero una vez te pares el error que cometas se hará más grande. Estarán todos tan acostumbrados a verte como ese ser capaz de lo que sea, ese valiente al que no le aterra nada, ese que va rápido y sin miedo que cuando cometas un error se te mezclaran las lágrimas con la decepción. Si, se que un error lo puede tener cualquiera, pero también se que a una persona que nunca se ha caído, el levantarse se le hará difícil, en cambio a aquellas que ya lo han intentado les es más fácil. 
Por eso en esto de la velocidad a la que se mueve nuestra vida o esas veces que oímos "corre mucho para la edad que tiene"  no debemos creer. Las cosas no suceden sin más. Si, es verdad que dejamos que sucedan, que el tiempo transcurra y sea el destino quien nos guíe como muchos dicen. 
Pero los únicos que decidimos cuando, cómo, dónde y el porque suceden las cosas somos nosotros mismos, dueños de ese destino que día a día se va haciendo presente, creando futuro. 
Lo único que quería que aprendieras de esto es que nada ni nadie dirija vuestra vida. Cada uno vamos a nuestro ritmo. 
Cada uno tenemos esa propia banda sonora en la que nuestro corazón hace de artista marcando los mejores acordes.